Hoy no quiero ir al colegio, pero mi madrastra no me va a dejar seguir durmiendo. Ella ni siquiera retrocede cuando me ve desnudo, muy por el contrario, ella ofrece su ayuda para despertarme. Mi madrastra siempre me puso muy cachondo y verla dándome una mamada es lo mejor que me pasó en la vida! Miles de veces me he pajeado pensando en su cuerpo, y una vez he probado su boca y su coño, le imploro a mi madrastra que se meta mi verga en el culo, pero ella se niega, quién sabe, con el tiempo a lo mejor la convenzo!