A mí me gusta mucho hacer ejercicio en la playa, pero mi padrastro se pone muy cachondo viéndome. Por eso, yo lo provoco y veo en su pantalón cómo crece el bulto de su verga y el rostro de él se vuelve sudoroso. Me desvisto rapidamente y luego le ofrezco mis agujeros para que él pueda cogerlos a su gusto. Una buena cogida en la playa con mi padrastro es algo que debo repetir, porque la adrenalina de ser descubierta con la verga de él metida en mi apretado coño es muy excitante!