Mi novia me deja plantado otra vez y yo decido que hoy se coge esté ella o no. Llamo a una prostituta que me hace rato me quiero coger y consigo que venga en menos de una hora. Luego de una breve charla, ella empieza a hacerme una mamada que hace sin condón. El tamaño de mi verga la convence de lamerme sin la condenada goma. Luego le como el coño sin preocuparme cuántos hombres metieron la verga ahí ese día. Ella me pone un condón y cabalga mi dura verga hasta que ella no resiste la tentación de sentir mi verga al natural, sin condón. El mejor dinero gastado en putas de mi vida.